Extraña Gravedad

Un sorprendente enfoque podría explicar los patrones aparentemente 'random' de nuestro sistema solar

Conoce la gravedad de la onda piloto.
FIONA MACDONALD 10 FEB 2018


Hay un patrón extraño en nuestro Sistema Solar: si nos fijamos en las órbitas de los primeros siete planetas, las distancias que éstos tienen del Sol se hacen cada vez más grandes con una regularidad predecible y cuantificablemente extraña.


Esta coincidencia la notaron en el siglo XVIII los astrónomos Johann Titius y Johann Bode. Y se llamó por supuesto, Ley de Titius-Bode , o más bien la Regularidad de Titius-Bode, y luego se usó para predecir la posición de Urano antes de que este fuera visto por primera vez y hasta del planeta enano, Ceres.

La razón por la que probablemente nunca has oído hablar de esta regularidad es porque no puede explicarse con nuestra comprensión actual de la relatividad general ni de la física newtoniana.

Tampoco es perfecta: Titius-Bode Law no pudo predecir la órbita de Neptuno en 1846. Desde entonces, muchos investigadores la han descartado como nada más que una extraña coincidencia.

Pero un grupo de físicos ahora dice que podría haber algo más. Su trabajo muestra que algo llamado "gravedad de onda piloto" podría explicar el patrón. De hecho, podría reemplazar el concepto de gravedad como lo conocemos. Aunque no es tanto un reemplazo, sino más bien una actualización de la gravedad que conocemos y amamos, basada en una interpretación casi olvidada de la mecánica cuántica, llamada teoría de la onda piloto.

Actualmente, la mayoría de los físicos piensan que lo que está detrás de los fenómenos de la mecánica cuántica es una explicación conocida como la interpretación de Copenhague, la que predica que las partículas no tienen ubicaciones reales hasta que son observadas.

La teoría de la ola piloto, por otro lado, sugiere que las partículas tienen posiciones precisas en todo momento, pero para que así sea, el mundo necesita ser extraño en otras formas, razón por la cual muchos físicos han descartado esa idea.

Pero en los últimos años, la teoría de la ola piloto ha ido creciendo en popularidad .

Ahora, los investigadores del Centro de Filosofía de las Ciencias de la Universidad de Lisboa en Portugal han tomado la idea y la han expandido al mundo macro, aplicándola a la forma en que se acomodan los planetas.

Actualmente se acepta que nuestro Sistema Solar se mantiene gracias a la gravedad por la fuerza con que, predominantemente nuestro Sol masivo distorsiona el espacio-tiempo a su alrededor.

Pero la gravedad de la onda piloto asume que cada cuerpo celeste también genera un gran campo de ondas que desempeña un papel en la ubicación de los planetas.

"Llamamos a este campo un campo gravitacional Theta, una perturbación subcuántica que se propaga a través del espacio llegando muy lejos", dijo el investigador Paulo Castro a ScienceAlert en una entrevista exclusiva.

"Entonces, usamos un principio de pilotaje, que establece que cada cuerpo celeste tenderá a moverse a las regiones donde su onda theta gravitacional tiene una mayor intensidad. De esta manera, la ola pilotará su cuerpo masivo teniendo una especie de atracción gravitacional sobre él. el nombre piloto de la gravedad de la onda ".


En la teoría de la Onda Piloto, las partículas tienden a acomodarse
donde las ondas de probabilidad son más profundas / intensas.

Eso es un poco complejo, pero una forma simple de pensarlo es imaginar ondas extendiéndose desde el Sol y también fuera de cada planeta. Ya sabemos que donde dos olas se juntan, estas hacen intensidades más grandes o si se junta una onda en creata con una profunda ambas se cancelan y desaparece la perturbación en ese punto. Los investigadores sugieren entonces que sabiendo dónde y cómo se entrecruzan esas ondas determina dónde se encuentra la órbita de un planeta, y no solamente la atracción regular de la gravedad del Sol.

Y de acuerdo con los cálculos del equipo, este modelo podría explicar finalmente el extraño patrón de Titius-Bode visto en el Sistema Solar.

No solo eso: si consideramos que la gravedad de la onda piloto es correcta, finalmente podría ayudar a unir las dos ideas más importantes de la física: la relatividad general y la mecánica cuántica.

"Hay dos conclusiones principales que se extraerán del documento", dijo Castro.

"El primero es que algunas características físicas del Sistema Solar se explican mejor si se aplica un modelo ondulatorio, en lugar de la física clásica de Newton o incluso la relatividad general. Este parece ser el caso de la regularidad de Titius-Bode".

"La segunda conclusión es que ahora parece razonable pensar que una teoría que unifica los reinos cuántico y macroscópico podría estar al alcance".

La parte más atractiva es que la gravedad de la onda piloto no requiere que la relatividad general o la mecánica cuántica sean descartadas por completo. Tan solo ajustarlas ligeramente para que sean capaces de trabajar juntas.

Es importante destacar que la mecánica cuántica necesitaría aceptar la existencia de ondas subcuánticas reales, como se predice en la teoría de ondas piloto, y no solo considerarlas como ondas de probabilidad.

"La relatividad general, por otro lado, debe aceptar que los fenómenos gravitacionales solo pueden describirse completamente si también se aplica un modelo de onda. En otras palabras, se describirán mejor algunos aspectos utilizando la relatividad general y otros que se describirán mejor utilizando la gravedad de la onda piloto. "dijo Castro.

"Es un gran cambio en nuestra forma de pensar".

Antes de dejarnos llevar demasiado, seamos claros en que este trabajo es muy teórico por el momento. Actualmente no tenemos una manera fácil de probar si esto realmente está sucediendo en nuestro Universo.

Una pista para ver si es real, será estudiar si la regularidad de Titius-Bode se sostiene en otros sistemas solares distantes, dice Castro, pero también vale la pena tener en cuenta que otros científicos piensan que la ley de Titius-Bode no es más que una coincidencia imperfecta.

Pero ya que todavía no tenemos una manera factible de explicar por completo nuestro Universo con una verdadera Teoría del Todo, no está de más estar abiertos a nuevas ideas.


Y el hecho de que esta nueva teoría ya explica un rompecabezas que ha existido por mucho tiempo sobre cómo se presenta nuestro Sistema Solar, es un buen comienzo.

La investigación ha sido publicada en la revista New Horizons in Mathematical Physics .


Artículo Original en Inglés: https://www.sciencealert.com/mind-bending-new-theory-of-everything-suggests-there-s-a-hidden-force-that-controls-our-universe

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